EH Bildu se ha excluido de las conversaciones para los próximos presupuestos del 2018, debido a que ha vetado el apoyo a los mismos de PSE – EE. La intención de la coalición soberanista es atraer al PNV a una situación similar a la que está viviendo el PDeCAT en Cataluña
Como «incompatible», ha calificado el Consejero de Economía del Gobierno Vasco, Pedro Azpiazu, a EH Bildu, para la negociación de los presupuestos autonómicos para el 2018. Ahora, tal como ha indicado, llamará a las puertas de Elkarrekin Podemos y del PP.
Su «fuera de juego», se produce porque ha vetado a que en el acuerdo participe también el PSE – EE, el socio de gobierno del PNV. El veto se produce después de que el partido que preside Pedro Sánchez, haya apoyado al PP en la ejecutoria del artículo 155 de la Constitución Española.
EH Bildu, se descarta, debido a que nada hace pensar que el Lehendakari Urkullu, vaya propiciar una crisis de gobierno para deshacerse de los tres Consejeros que el PSE – EE tiene en el ejecutivo de Lakua.
De la misma opinión es el Presidente del PNV, que ha negado la ruptura del acuerdo con el partido que preside Idoia Mendía, máxime, cuando “[…] las cosas van bastante bien”, tal como ha declarado en un programa de la Cadena SER.
El primer y último contacto, al menos hasta ahora, entre Azpiazu y los representantes de EH Bildu, se produjo en la mañana de este jueves y ha durado una hora. Las conversaciones se cierran en falso, máxime cuando Maddalen Iriarte, de EH Bildu, dice no entender por qué no se mantienen los pactos en Madrid y si en Euskadi.
EH Bildu sueña con reproducir en Euskadi, el frentismo que se está viviendo en Catauña, donde un partido máximo representante del nacionalismo burgués, PDeCAT, se ha visto arrastrado a una aventura de incierto final, por los antisistema de la CUP.