Todo parece indicar que el año 2018 que ahora comienza, será un periodo de «impasse» político, sin contienda electoral al menos en 12 meses, para que los partidos políticos se centren en su mercado doméstico y que propicien acuerdos políticos de calado en la Cámara de Vitoria
El año 2018 será un oasis de tranquilidad para la política vasca, al menos la que tiene que ver con la contienda electoral, ya que hasta mayo de 2019, no se producirán unos nuevos comicios, en este caso serán las elecciones municipales.
Por ello, las previsiones es que las formaciones políticas se dediquen durante este año 2018, es que se puedan centrarse en su actividad orgánica, y que también se puedan tejer los acuerdos necesarios para sacar adelante iniciativas legislativas.
El 2017 ha estado marcado por los congresos para dilucidar la composición de su dirección en todos los partidos políticos con representación en la Cámara de Vitoria, salvo el PNV que desarrollo su Congreso en el año 2016.
Esta «calma chicha» que se prevé para el 2018, es un «impasse» de la frenética actividad que se desarrollo entre mayo de 2015 y septiembre de 2016, que se saldó con cuatro campañas electorales.
Con una dirigencia, en la mayor parte de los partidos políticos, que gozan de un margen de 3 años, al menos, para desarrollar sus políticas, en estos 18 meses las formaciones políticas tendrán la suficiente estabilidad para llegar a acuerdos políticos de calado.
Entre estos grandes acuerdos, «de país» se podría calificarlos, se encontrarían lograr el nuevo encaje de Euskadi en España, máxime cuando el PSE – EE ya ha declarado que lo que busca es una reforma constitucional para lograr un Estado plenamente federal.
Atención máxima recabará el encaje del «derecho a decidir» dentro del ordenamiento jurídico español, un asunto peliagudo que ha levantado ronchas cada vez que algún grupo político, sobre todo nacionalista, lo ha presentado en foros políticos como la Carrera de San Jerónimo.
Fuente – El Mundo | Imagen – Iker Merodio